Mariano: ¿Es cierto que los abdominales producen incontinencia urinaria, prolapsos y disfunciones sexuales, especialmente en las mujeres?

 Dr. Juan Bosco Calvo: Lo que se dice de los ejercicios abdominales desde esa perspectiva es una falacia en todo sentido, es rotundamente falso.

 Lo que ocurre es que sí es cierto que en muchos lugares se hacen rutinas de abdominales que tienen muy poca transferencia a lo que se está buscando, incluso pueden ser peligrosos, a partir de ahí podemos debatir qué ejercicios de abdominales pueden ser mejores que otros para determinada acción deportiva o rehabilitadora.

 Decir que los abdominales habría que prohibirlos, eso es puro y duro marketing para tratar de tirar por tierra Pilates.

Pilates lleva bastantes años y desde los años 70 está siendo utilizado por las mejores clínicas de rehabilitación y centros deportivos de EEUU y de gran parte del mundo. Y desde los años 2000 en Europa y Sudamérica. Entonces no sería así si provocara estos problemas.

Es más muchos de los abdominales que vemos en los gimnasios provienen de conceptos de Pilates, y esos conceptos bien llevados y actualizados son muy positivos.

 No es cierto que Pilates provoque incontinencia urinaria ni prolapsos, todo eso es mentira. Lo que ocurre es que una persona que no tenga indicación de Pilates, que ocurre, no le puedo hacer ni Pilates ni otras cosas.

Entonces si le hacemos hacer abdominales manteniendo la respiración con la maniobra de Valsalva, en definitiva aumentar la presión en otras zonas, si la persona tiene una laxitud en el suelo pélvico, pues probablemente le empeore, pero eso no es hacer Pilates, es hacer mal las cosas. Si se hace bien Pilates no hay ningún problema.

La Gimnasia Hipopresiva es una gimnasia que me parece estupenda, me parece una gimnasia muy buena que tiene sus indicaciones, que después del parto es la mejor la manera de empezar a tonificar el abdomen, que tiene una acción muy directa sobre el transverso del abdomen, que activa muy bien el suelo pélvico y que tiene su indicación perfecta y es estupenda.

Pero de ahí a intentar que la gimnasia hipopresiva sustituya a los abdominales en los gimnasios, se utilice con los deportistas, se utilice en rehabilitación más que Pilates y demás, discúlpenme no está demostrado.

 También puedo decir, de la misma manera, que cuando Pilates se hace mal funciona mal y la gimnasia hipopresiva cuando se hace mal también funciona mal.

He tenido 3 casos con parálisis diafragmática. Si se utiliza mal el diafragma y si se utiliza en exceso crea un bloqueo diafragmático que la persona es incapaz de realizar una respiración abdominal por tener un diafragma paralizado como consecuencia de haber hecho mal la gimnasia hipopresiva.

Por lo tanto si digo la gimnasia hipopresiva es un problema estaría haciendo un marketing y un flaco favor a la ciencia porque me parece que la gimnasia hipopresiva tiene su lugar y Pilates tiene el suyo.

 No es forma de hablar de esa manera y de lanzar a los abogados contra todos los profesores de gimnasia y de pilates simplemente porque están haciendo abdominales.

 Por lo tanto, insisto, gimnasia hipopresiva sí, en sus indicaciones, sin suplantar a Pilates. Pilates sí, está muy bien hecho también, con muchas más posibilidades que las que la gimnasia hipopresiva da.

 Pilates es un método, y eso quiere decir que tiene una sistemática, una metodología y una explicatividad amplísima con cantidad de ejercicios de conceptos, en cambio la gimnasia hipopresiva tiene un recorrido bastante corto, es una técnica, que de antiguo se conoce, desde el yoga incluso se practicaba, es una maniobra que se hace, que está bien y nada más.

No es ninguna metodología como para sustituir lo que se hace en los gimnasios y todo el mundo ponerse a hacer hipopresivos e ir por la calle realizando hipopresivos.

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